El entrenamiento de vida

es un proceso psicoeducativo diseñado para promover en las personas y la comunidad el desarrollo o aumento de habilidades cognitivas, emocionales y sociales, para transitar una vida saludable. El entrenador de vida es una persona capacitada en la comprensión del trastorno de la conducta suicida y su implicancia. Cuenta con herramientas conceptuales, procedimentales y actitudinales para comprender el sentido y sentimiento profundo de la vida, para der utilizada con personas que transitan el trastorno de la conducta suicida. Guía y ayuda a las personas y su entorno a construir fortalezas individuales y colectivas para afrontar la vida y mejorar su calidad.

Una mejora rápida en que se muestra que la crisis ya fue superada, puede ser uno de los indicadores de encapsulamiento de los procesos suicidas. Esto se puede dar por varias circunstancias, una puede ser que el involucrado trate de conformar a su entorno por verse juzgado o por haber minimizado la problemática, o situaciones que llevan a construir una ideación suicida.
Aquí es importante que la persona que intervenga, presente una actitud abierta, escucha atenta y activa, con palabras que demuestren atención y no juzgamiento. Frente a una expresión de deseo de morir, es pertinente preguntar que lo lleva a este pensamiento, es en esta pregunta, que a veces permite encontrar las pistas para descartar un posible comentario o chiste desafortunado. Desde un pensamiento saludable, con la vida no se juega, ni se la toma a broma.